La insulina se inyecta justo debajo de la piel. Su médico o el personal del consultorio pueden mostrarle cómo y dónde aplicarse una inyección de insulina. Los lugares habituales para inyectarse insulina son la parte superior del brazo, el frente y el costado de los muslos y el abdomen. No se inyecte insulina en un lugar que esté a menos de 2 pulgadas del ombligo.
Para evitar que se le engrose la piel, trate de no inyectarse insulina en el mismo lugar una y otra vez. En vez de eso, vaya rotando los lugares de inyección.
No hay comentarios:
Publicar un comentario